martes, 17 de julio de 2007

Sólo esta falla tienen los cerezos


The entire world within this hut, originally uploaded by ionushi.

Vástago de una acaudalada familia de guerreros aristócratas, a los quince años Satô Norikiyo se incorporó a la guardia del Emperador Toba, en cuya corte destacó por sus habilidades en el juego de pelota, la música y desde luego la poesía, que le dio fama y posteridad con el nombre de Saigyô (1118-1190), bajo el cual tomó la senda de Buda para trazar el camino en que lo emularía cinco siglos después Matsuo Basho. Son particularmente apreciados sus poemas sobre los cerezos, en particular los que escribió en su retiro de las montañas de Yoshino. Uno de los más famosos, porque lo recoge la pieza de nô Saigyô y los cerezos (西行桜, Saigyô zakura) y tal vez porque expresa un sentimiento que el alma gregaria japonesa difícilmente confiesa, es también uno de los que prefiero:

    花見にとむれつゝ人の來るのみぞあたら櫻の咎には有りける
    hanami ni to muretsutsu hito no kuru nomi zo atara sakura no toga ni wa arikeru

    A ver las flores
    vienen una tras otra
    las muchedumbres:
    ¡ay, los cerezos tienen
    esta única falta!

Hay que decir que, aunque las muchedumbres siguen llegando al pueblo de Yoshino, son pocos los los que se acercan hasta la cabaña de Saigyô. La fotografía que ilustra esta página es del 8 de abril pasado, como el resto de la serie que el curioso puede ver con sólo pulsarla.

1 comentario:

ojo humano dijo...

Es muy extraño cómo llegué aquí, pero me alegro. Me ha parecido un sitio precioso.
Lo estoy leyendo.
Estoy agradecida de la red donde puedo leer lo que nunca, de otra manera, hubiera podido.
Un saludo desde Chile.